Una de las impresiones que te quedan cuando visitas Berlin son sus enormes avenidas. Una de ellas y posiblemente de las más conocidas nace en la misma Puerta de Brandenburgo y te lleva hasta una enorme rotonda (Grosser Stern-Gran Estrella) en la que se encuentra la imponente Columna de la Victoria, se trata de la Strasse des 17 Jun. El nombre de esta avenida está dedicada a una fecha muy concreta, el 17 de junio en la que se vivió una trágica jornada en 1953 con revuelta aplastada por la fuerza por la Unión Soviética.
La Strasse des 17 Jun también atraviesa el pulmón de la ciudad, unos hermosos y enormes jardines, el Tiergarten que también ha sabido recomponerse a lo largo de la historia en los que ha estado a punto de desaparecer en diferentes ocasiones.
Muchos son los que consideran que la mejor forma de acercarse a la Columna no es pasarla de largo en taxi o bicicleta, sino llegar paseando desde la Puerta de Brandenburgo en un paseo de unos 25 minutos que es lo que se tardan en recorrer los 2,6km que la separan.
La columna es un homenaje a la victoria de Prusia en la Guerra de los Ducados de 1864, la posterior Guerra Alemana de 1866 y la Guerra Francoprusiana de 1870/71. Su ubicación inicial no fue en la que se encuentra actualmente, ya que tras su construcción en 1873, fue situada justo frente al Reichstag, en Königsplatz.
La situación actual en la rotonda Grosser Stern la llevaron a cabo los nazis como símbolo de su prevalencia militar.
La columna sobre la que se asienta la escultura de bronce de Friedrich Drake mide 68 metros y por ella se tiene acceso gracias a 285 escalones que te llevan justo hasta los pies de la diosa alada de la Victoria, a la que los berlineses llaman cariñosamente Goldelse (Elsa de oro). Desde allí una imponente vista de Berlín de 360 grados y la sensación de rendirte a la impresionante figura de la Diosa Dorada de ocho metros de altura que parece vigilar a su ciudad desde lo más alto.
Los amantes del cine también tendrán en este punto un lugar especial ya que la Elsa de Oro tuvo un papel destacado en las películas del galardonado director Wim Wenders, con "El cielo sobre Berlín" y "Tan lejos, tan cerca", en la que los ángeles protagonistas tenían a la diosa alada como punto de encuentro y lugar en el que miraban a la ciudad y sus habitantes a los que daban consuelo con su cercanía. Tan solo visibles para los niños, los actores protagonistas crearon bellas imágenes junto a la Elsa de Oro con Berlín como fondo.
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